En medio de un país afectado por la guerra civil, el Cardenal Dieudonné Nzapalainga, Arzobispo de Bangui en la República Centroafricana, recorre diversas “periferias” de esta nación para llevar esperanza a la población, donde tristemente algunos “mueren como animales”.
“Por eso, me despojo de mi atuendo de cardenal, me hago pequeño, recorro el país y les digo: ‘Si los hombres los han olvidado, Dios no los ha olvidado’”, enfatizó el purpurado.
En declaraciones a la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada, que tiene numerosos proyectos caritativos en esta nación, el Cardenal Nzapalainga contó que ha llegado a lugares en los que las personas están prácticamente abandonadas a su suerte, incluso sin atención médica.