Destituido Mons. Strickland dirige el Rosario frente a asamblea de obispos de Estados Unidos

Por Joe Bukuras

15 de noviembre de 2023

Nov 15, 2023

Mons. Joseph Strickland, Obispo Emérito de Tyler, no se unió el martes a sus compañeros obispos estadounidenses en la asamblea anual de otoño. Sin embargo, no estaba muy lejos, sino que se encontraba dirigiendo el rezo del Rosario con unas pocas docenas de personas afuera del hotel donde la reunión tenía lugar.

“Pensé que como estaba en la ciudad y no tenía que ir a la reunión, simplemente vendría aquí y oraría”, explicó Mons. Strickland a CNA —agencia en inglés de EWTN— en una breve entrevista.

La aparición del Prelado de 65 años ocurrió apenas tres días después de que el Papa Francisco lo destituyera como Obispo de Tyler, en Texas.

Sin embargo, Mons. Strickland sigue siendo un obispo estadounidense y no hay nada en los estatutos de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB, por sus siglas en inglés) que le impida participar en la asamblea de esta semana.

En una entrevista de cinco minutos fuera del hotel, Mons. Strickland afirmó que el Nuncio Apostólico en Estados Unidos, Cardenal Christophe Pierre, le pidió que no participara. El representante vaticano, quien se dirigió a los obispos el martes por la mañana, rechazó ese día la solicitud de CNA para entrevistarlo.

El Obispo Emérito de Tyler indicó que de todos modos se presentó en el exterior del hotel porque “ya tenía planes de estar aquí”. También aseguró a CNA que se había comprometido a rezar un Rosario fuera de la reunión de la USCCB y que es algo que ha llevado a cabo en los últimos años.

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Mons. Strickland dirigió el Rosario de rodillas. Un hombre que también rezaba arrodillado sostenía un cartel en el que se leía: “Amamos al Obispo Strickland”.

“Hoy es un día para vivir más plenamente al Señor. Y eso es lo que estamos llamados a hacer. Y eso es en lo que animaría a los obispos a seguir centrándose. Todos los días, cuando me despierto, tengo que recordar: ¿de qué se trata esto? Se trata de seguir a Jesucristo”, dijo el Prelado a CNA.

“Y hoy es un nuevo día para seguirlo con alegría y esperanza. Su luz es tan brillante como siempre. Todos debemos recordar eso, y especialmente mis hermanos obispos”, añadió.

Mons. Strickland aseguró que podría asistir a futuras reuniones de la USCCB, pero pensó que sería mejor no hacerlo este año porque “no quería ser una distracción”.

¿Por qué Mons. Strickland fue destituido?

Mons. Strickland afirmó a CNA que cuando se le notificó su destitución, recibió un correo electrónico “con un archivo adjunto de la carta que decía que el Santo Padre... me había relevado de las responsabilidades como obispo de Tyler”.

La destitución del 11 de noviembre sigue a una investigación formal que el Papa Francisco ordenó sobre Mons. Strickland y su diócesis, y que se llevó a cabo en junio.

Nunca se publicó un informe oficial sobre esa investigación, ni el Vaticano ha revelado por qué el Prelado fue destituido de su cargo.

“Realmente no puedo buscar ninguna razón excepto que he amenazado a algunos de los poderes establecidos con la verdad del Evangelio”, afirmó Mons. Strickland en una entrevista con LifeSiteNews después de su destitución.

Obispo de Tyler desde 2012, Mons. Strickland ha sido muy franco sobre ciertas cuestiones sociales católicas como el aborto y la ideología de género. El polémico Prelado ha ganado un número considerable de seguidores en las redes sociales, en las que ha criticado las agendas políticas de los funcionarios electos que ignoran abiertamente la santidad de los no nacidos.

El Cardenal Daniel DiNardo, Arzobispo de Galveston-Houston, de la cual la Diócesis de Tyler es sufragánea, explicó después de la destitución de Mons. Strickland que la investigación se centró en “todos los aspectos del gobierno y el liderazgo” en la diócesis, que finalmente concluyó con la recomendación al Papa Francisco de que “la continuación en el cargo del Obispo Strickland no era factible”.

En declaraciones a CNA, Mons. Strickland no proporcionó ningún detalle sobre qué cuestiones administrativas pudieron haber contribuido a su destitución.

“Sí, hay acusaciones, pero tuvimos la apelación del obispo que fue de $3,1 millones, mayor que nunca en la historia de la diócesis”, afirmó.

Mons. Strickland también destacó que el número de seminaristas es de 21, así como “un presbiterio con grandes sacerdotes”.

“Así que sí, puedes hacer acusaciones de cualquier cosa. Pero creo que si simplemente miras el historial de la diócesis, ha crecido. La gente se está mudando. Es un lugar feliz. No es perfecto. No es el cielo, pero está en buenas condiciones”, dijo.

Cuando se le preguntó si se había dado alguna razón para su destitución, Mons. Strickland dijo que el Nuncio Apostólico había dado “razones verbales” que eran “bastante extensas”, una de las cuales era que había sido demasiado franco.

Un ejemplo notable es un tuit del 12 de mayo en el que sugería que el Papa Francisco estaba “socavando el depósito de la fe”.

“Hubo cosas que sí hice. He planteado muchas preguntas. He hecho todo lo posible para proteger el depósito de la fe. Y, ya sabes, siento el mismo compromiso”, aseguró.

“Algunos dicen que tal vez he hablado demasiado, pero ¿cómo podemos hablar demasiado por la verdad de Cristo? Es un tesoro. Es una luz hermosa que el mundo necesita desesperadamente”, añadió.

Otra razón que le dieron fue “el hecho de que no cerré la Misa en latín en mi diócesis porque, ya sabes, me sentía como un pastor, no podía hacer eso”, indicó, en referencia a las restricciones que el Papa Francisco impuso a la Misa tradicional en su motu proprio Traditionis custodes, de julio de 2021.

Para el Obispo Emérito el documento “no era realmente claro” y podía debatirse, pero añadió que “muchos obispos no han cerrado la Misa en latín en su diócesis”.

En última instancia, afirmó que su destitución fue el resultado de “una acumulación de cosas”, y agregó que está “comprometido con Jesucristo” y ama a la Iglesia.

“Amo todos los aspectos de la Iglesia, pero creo que todos estaríamos de acuerdo en que la Iglesia necesita ser más fuerte en Cristo, y eso es lo que he alentado a través de todo esto. Mi oración es que cada obispo, cada fiel católico, pueda acercarse al Sagrado Corazón de Cristo”, expresó.

Traducido y adaptado por el equipo de ACI Prensa. Publicado originalmente en CNA.