El Servicio Sacerdotal de Urgencia cumple 70 años en la Arquidiócesis de Buenos Aires, llevando alivio, consuelo, y siendo un instrumento de la misericordia del Señor para ancianos y enfermos.

Desde hace 25.550 noches, los miembros de este servicio pastoral se turnan para realizar guardias y llevar asistencia espiritual a quienes lo soliciten.

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Un laico de guardia atiende los pedidos por teléfono y otro de los voluntarios acompaña al sacerdote a visitar al enfermo, ya sea en su domicilio o en el centro de salud donde se encuentre.

Allí se le ofrece la Confesión, cuando la persona está consciente; la Comunión, si es posible; y en todos los casos, la Unción de los enfermos. “El objetivo: salvar la vida, asegurar la vida eterna. ¿Para qué? ¡Para que vaya al cielo!”, destaca Enrique Méndez Elizalde, miembro de la Comisión Directiva, en un artículo para MDZ Online.

Se trata de un servicio pastoral gratuito, que funciona cada noche entre las 21:30 y las 06:00 horas. “Un alma que se vaya al cielo justifica mil horas de guardia”, sostiene.

En su visita a Argentina en 1987, el Papa Juan Pablo II destacó la creación del primer Servicio Sacerdotal de Urgencia: “A través de él, cada noche sacerdotes y laicos, en vigilante espera, se movilizan para atender el llamado de Cristo a través de sus enfermos”.

“Sé también que este hermoso ejemplo se ha multiplicado en diversas diócesis de la Argentina. Me da mucha alegría, y los aliento a continuar en este esfuerzo apostólico mediante el cual se hace visible la solicitud de la Iglesia, que vela día y noche por sus hijos más necesitados", añadió.

Cuando era Arzobispo de Buenos Aires, el Cardenal Jorge Mario Bergoglio —hoy Papa Francisco— perteneció al Servicio Sacerdotal de Urgencia. En una carta enviada ya desde la Cátedra de Pedro, destacó la obra que realizan.

El Santo Padre valoró que el Servicio “acude con afecto y asiste con ternura a los enfermos”.

Y dirigiéndose a sus miembros, anheló: “Que nuestras manos estrechen sus manos, acercándolos a nosotros para que sientan el calor de nuestra presencia, de nuestra amistad y de la fraternidad".

“Los aliento a continuar en este esfuerzo apostólico mediante el cual se hace visible la solicitud de la Iglesia, que vela día y noche por sus hijos más necesitados", animó.

El servicio se solicita por vía telefónica al (011) 4801-2000. 

Sus miembros animan a que cada vez más personas se sumen.