Un misionero mexicano en Corea del Sur, un sacerdote diocesano de Seúl y una religiosa del país asiático residente en España explican las expectativas y dificultades ante el reto de organizar la próxima JMJ en el año 2027.
El P. Ramiro Zúñiga, lleva 24 años trabajando en Corea del Sur, donde peregrina "una Iglesia joven, muy viva, con muchos éxitos" tanto desde el punto de vista vocacional, económico y organizacional.
Sin embargo, explica, también tiene "muchos retos, porque el bienestar de la economía no siempre trae el bienestar de la fe. Para mucha gente la seguridad económica, el bien vivir, se convierte en una seguridad donde ya Dios no hace falta".