La Conferencia Episcopal Ecuatoriana (CEE) publicó una declaración oficial en la que respalda las demandas de miles de jubilados que reclaman la atención del gobierno.
“El país está conmovido por la rebelión de los jubilados. No esperaba tan vigoroso reclamo de ancianos gastados por los años, la pobreza y la enfermedad. Nosotros mismos somos testigos del drama de sacerdotes ancianos, que después de largos años de aportes personales y patronales del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), reciben pensiones aún más insignificantes”, denuncia el texto.
Los obispos reconocen “que el mal no es de ahora, viene de años atrás, de una interminable sucesión de irresponsabilidades, demagogias e inmoralidades” pero piden al Congreso Nacional, el gobierno y las autoridades de seguridad social, resolver el problema de este grupo social.