Martes 22 de enero

Evangelio según San Marcos, capítulo 2, versículo del 23 al 28


23 Sucedió que, un día de sábado, El iba atravesando los sembrados, y sus discípulos, mientras caminaban, se pusieron a arrancar espigas. 24 Entonces los fariseos le dijeron: "¿Ves?" ¿Por qué hacen, en día de sábado, lo que no es lícito?" 25 Respondióles: "¿Nunca leísteis lo que hizo David cuando tuvo necesidad y sintió hambre, él y sus compañeros, 26 cómo entró en la casa de Dios, en tiempo del sumo sacerdote Abiatar y comió de los panes de la proposición, los cuales no es lícito comer sino a los sacerdotes y dió también a sus compañeros?" 27 Y les dijo: "El sábado se hizo por causa del hombre, y no el hombre por causa del sábado; 28 de manera que el Hijo del hombre es dueño también del sábado"

Comentario

26. En I Rey. 21, 1 ss. se llama Aquimelec, padre de Abiatar, el cual le ayudaba. Cf. Mat. 12, 1 ss.

27. ¡Qué caridad tan divina refleja esta sentencia! Jesús condena aquí definitivamente todo ritualismo formulista (véase Juan 4, 23 ss.).


Estos comentarios corresponden a la versión electrónica de la Biblia y Comentario de Mons. Juan Straubinger, cortesía de VE Multimedios