Viernes 1 de marzo
Evangelio según San Mateo, Capítulo 21, versículos 33-43. 45-46
Parábola de los viñadores homicidas.
33 "Escuchad otra parábola. "Había un dueño de casa, que plantó una viña, la rodeó de una cerca, cavó en ella un lagar y edificó una torre; después, la arrendó a unos viñadores, y se fue a otro país. 34 Cuando llegó el tiempo de los frutos, envió sus siervos a los viñadores para recibir los frutos suyos. 35 Pero los viñadores agarraron a los siervos, apalearon a éste, mataron a aquél, lapidaron a otro. 36 Entonces envió otros siervos en mayor número que los primeros; y los trataron de la misma manera. 37 Finalmente les envió su hijo, diciendo: "Respetarán a mi hijo". 38 Pero los viñadores, viendo al hijo, se dijeron entre sí: "Este es el heredero. Venid, matémoslo, y nos quedaremos con su herencia". 39 Lo agarraron, lo sacaron fuera de la viña y lo mataron. 40 Cuando vuelva pues el dueño de la viña, ¿qué hará con aquellos viñadores?" 41 Dijeron: "Hará perecer sin piedad a estos miserables, y arrendará la viña a otros viñadores, que le paguen los frutos a su tiempo". 42 Y díjoles Jesús: "¿No habéis leído nunca en las Escrituras: "La piedra que desecharon los que edificaban, ésa ha venido a ser cabeza de esquina; el Señor es quien hizo esto, y es un prodigio a nuestros ojos?" 43 Por eso os digo: El reino de Dios os será quitado, y dado a gente que rinda sus frutos.
45 Los sumos sacerdotes y los fariseos, oyendo sus parábolas, comprendieron que de ellos hablaba. 46 Y trataban de prenderlo, pero temían a las multitudes porque éstas lo tenían por profeta.
Estos comentarios corresponden a la versión electrónica de la Biblia y Comentario de Mons. Juan Straubinger, cortesía de VE Multimedios