Feria de Cuaresma

marzo 24, 2025

Color: morado

Lecturas diarias:

  • Primera Lectura

    2 Reyes 5:1-5

    1Naamán, jefe del ejército del rey de Siria, era un hombre importante ante su señor, y muy respetado porque gracias a él el Señor había concedido la victoria a Siria. Este hombre, que era un valiente, padecía lepra.
    2Los sirios habían realizado una incursión, y habían traído a una muchacha jovencita de tierra de Israel, que había pasado al servicio de la mujer de Naamán.
    3Le dijo a su señora:
    —Ojalá mi señor estuviera ante el profeta que hay en Samaría. Seguro que él lo curaría de la lepra.
    4Naamán fue y se lo contó a su señor diciendo:
    —Esto y aquello ha dicho la muchacha procedente de Israel.
    5Contestó el rey de Siria:
    —Anda, vete; yo enviaré cartas al rey de Israel. Partió llevando consigo diez talentos de plata, seis mil siclos de oro y diez trajes.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 42:2-3; 43:3-4

    42
    2Como ansía la cierva las corrientes de agua,
    así te ansía mi alma, Dios mío.
    3Mi alma está sedienta de Dios, del Dios vivo.
    ¿Cuándo podré ir a ver el rostro de Dios?
    43
    3Envía tu luz y tu verdad;
    que ellas me guíen y me conduzcan a tu monte santo, a tus moradas;
    4Y me acercaré al altar de Dios,
    al Dios de mi alegría y de mi gozo, y te alabaré con la cítara, ¡oh Dios, Dios mío!

  • Evangelio

    Lucas 4:24-30

    24Y añadió:
    —En verdad os digo que ningún profeta es bien recibido en su tierra.
    25Os digo de verdad que muchas viudas había en Israel en tiempos de Elías, cuando durante tres años y seis meses se cerró el cielo y hubo gran hambre por toda la tierra;
    26y a ninguna de ellas fue enviado Elías, sino a una mujer viuda en Sarepta de Sidón.
    27Muchos leprosos había también en Israel en tiempo del profeta Eliseo, y ninguno de ellos fue curado, más que Naamán el Sirio.
    28Al oír estas cosas, todos en la sinagoga se llenaron de ira
    29y se levantaron, le echaron fuera de la ciudad y lo llevaron hasta la cima del monte sobre el que estaba edificada su ciudad para despeñarle.
    30Pero él, pasando por medio de ellos, se marchó.