San Serafín de Montegranaro, Religioso (Memoria)

octubre 12, 2023

Color: Blanco

Lecturas diarias:

  • Primera Lectura

    Malaquías 3:13-20

    13Duras contra Mí son vuestras palabras,
    dice el Señor. Y aún decís: “¿Qué hemos hablado contra Ti?”.
    14Lo que habéis dicho: “Vano es servir a Dios;
    ¿qué hemos ganado con guardar sus preceptos, y con andar en duelo ante el Señor de los ejércitos?
    15Ahora, pues, nosotros
    tendríamos que llamar dichosos a los arrogantes, incluso a los que prosperan practicando la impiedad y a los que tientan a Dios y quedan a salvo”.
    16»Pero los temerosos del Señor hablan entre sí de otra manera, y el Señor les atiende y les escucha. En su presencia se escribe un libro de memorias en favor de los que temen al Señor y honran su Nombre.
    17Serán mi propiedad —dice el Señor de los ejércitos— el día que Yo actúe. Me apiadaré de ellos como se apiada un hombre de su hijo que le sirve.
    18Entonces volveréis a distinguir entre el justo y el impío, entre el que sirve a Dios y el que no le sirve.
    19Ved que llega el día,
    ardiente como un horno, en que todos los arrogantes y los que practican la impiedad serán como paja: el día que ha de venir los abrasará —dice el Señor de los ejércitos—, hasta que no les quede ni raíz ni rama.
    20Mas para vosotros, los que teméis mi Nombre,
    se elevará el sol de justicia, que trae la salud en sus alas; y saldréis brincando como becerros cebados.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 1:1-4, 6

    1Dichoso el hombre
    que no sigue el consejo de impíos, ni se detiene en el camino de pecadores, ni toma asiento con farsantes,
    2sino que se complace en la Ley del Señor,
    y noche y día medita en su Ley.
    3Será como un árbol
    plantado al borde de la acequia, que da fruto a su tiempo, y no se marchitan sus hojas: cuanto hace prospera.
    4No así los impíos, no así.
    Son como polvo que dispersa el viento.
    6Porque el Señor vela sobre el camino de los justos,
    mientras el de los impíos acaba en perdición. 

  • Evangelio

    Lucas 11:5-13

    5Y les dijo:
    —¿Quién de vosotros que tenga un amigo y acuda a él a medianoche y le diga: «Amigo, préstame tres panes,
    6porque un amigo mío me ha llegado de viaje y no tengo qué ofrecerle»,
    7le responderá desde dentro: «No me molestes, ya está cerrada la puerta; los míos y yo estamos acostados; no puedo levantarme a dártelos»?
    8Os digo que, si no se levanta a dárselos por ser su amigo, al menos por su impertinencia se levantará para darle cuanto necesite.
    9»Así pues, yo os digo: pedid y se os dará; buscad y encontraréis; llamad y se os abrirá;
    10porque todo el que pide, recibe; y el que busca, encuentra; y al que llama, se le abrirá.
    11»¿Qué padre de entre vosotros, si un hijo suyo le pide un pez, en lugar de un pez le da una serpiente?
    12¿O si le pide un huevo, le da un escorpión?
    13Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar a vuestros hijos cosas buenas, ¿cuánto más el Padre del cielo dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan?

  • Primera Lectura

    1 Corintios 12:4-11

    4Hay, sí, diversidad de dones, pero el Espíritu es el mismo;
    5y diversidad de ministerios, pero el Señor es el mismo;
    6y diversidad de acciones, pero Dios es el mismo, que obra todo en todos.
    7A cada uno se le concede la manifestación del Espíritu para provecho común:
    8a uno se le concede por el Espíritu palabra de sabiduría, a otro palabra de ciencia según el mismo Espíritu;
    9a uno fe en el mismo Espíritu, a otro don de curaciones en el único Espíritu;
    10a uno poder de obrar milagros, a otro profecía, a otro discernimiento de espíritus; a uno diversidad de lenguas, a otro interpretación de lenguas.
    11Pero todas estas cosas las realiza el mismo y único Espíritu, que las distribuye a cada uno según quiere.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 98:1-4

    1Salmo.
    Cantad al Señor un cántico nuevo porque ha hecho maravillas. Su diestra le ha salvado, su santo brazo.
    2El Señor ha dado a conocer su salvación;
    ha revelado su justicia a los ojos de las naciones.
    3Se acordó de su misericordia y fidelidad
    con la casa de Israel. Todos los confines de la tierra han visto la salvación de nuestro Dios.
    4Aclamad al Señor, la tierra entera;
    gritad, cantad, entonad salmos.

  • Evangelio

    Mateo 18:1-5

    1En aquella ocasión se acercaron los discípulos a Jesús y le preguntaron:
    —¿Quién es pues el mayor en el Reino de los Cielos?
    2Entonces llamó a un niño, lo puso en medio de ellos
    3y dijo:
    —En verdad os digo: si no os convertís y os hacéis como los niños, no entraréis en el Reino de los Cielos.
    4Pues todo el que se humille como este niño, ése es el mayor en el Reino de los Cielos;
    5y el que reciba a un niño como éste en mi nombre, a mí me recibe.