Lecturas diarias:
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Primera Lectura
Ezequiel 18:25-28
25Y decís: “No son rectos los caminos del Señor”. Escucha, casa de Israel: ¿no son rectos mis caminos, o más bien, vuestros caminos son malos?26Si el justo se aparta de su justicia y comete la iniquidad, morirá. Por la injusticia que haya cometido, morirá.27Y si el impío se aparta de la impiedad que había obrado y hace justicia y derecho, él mismo se dará la vida.28Si se arrepiente y se aparta de todos los delitos que había cometido, ciertamente, vivirá, no morirá. -
Salmo Responsorial
Salmo 25:4-9
4(Dálet) Muéstrame, Señor, tus caminos,
enséñame tus sendas.5(He) Hazme caminar en tu fidelidad, instrúyeme,
pues Tú eres mi Dios salvador, (Vav) y en Ti espero todo el día.6(Záin) Acuérdate, Señor, de tu misericordia
y de tu amor, que son eternos.7(Het) No recuerdes los pecados y delitos de mi juventud.
Acuérdate de mí según tu misericordia, por tu bondad, ¡Señor!8(Tet) El Señor es bueno y recto;
por eso muestra el camino a los pecadores,9(Yod) guía a los mansos en la justicia,
enseña su camino a los humildes. -
Segunda Lectura
Filipenses 2:1-11
1Así pues, por la consolación en Cristo y por el consuelo de la caridad, por la comunión en el Espíritu y por las entrañas de misericordia,2colmad mi gozo con vuestro mismo sentir, con vuestra misma caridad y concordia y con vuestros mismos anhelos.3No actuéis por rivalidad ni por vanagloria, sino con humildad, considerando cada uno a los demás como superiores,4buscando no el propio interés, sino el de los demás.5Tened entre vosotros los mismos sentimientos que tuvo Cristo Jesús,6el cual, siendo de condición divina,
no consideró como presa codiciable el ser igual a Dios,7sino que se anonadó a sí mismo
tomando la forma de siervo, hecho semejante a los hombres; y, mostrándose igual que los demás hombres,8se humilló a sí mismo haciéndose obediente
hasta la muerte, y muerte de cruz.9Y por eso Dios lo exaltó
y le otorgó el nombre que está sobre todo nombre;10para que al nombre de Jesús toda rodilla se doble
en los cielos, en la tierra y en los abismos,11y toda lengua confiese:
«¡Jesucristo es el Señor!», para gloria de Dios Padre.OR
Filipenses 2:1-5
1Así pues, por la consolación en Cristo y por el consuelo de la caridad, por la comunión en el Espíritu y por las entrañas de misericordia,2colmad mi gozo con vuestro mismo sentir, con vuestra misma caridad y concordia y con vuestros mismos anhelos.3No actuéis por rivalidad ni por vanagloria, sino con humildad, considerando cada uno a los demás como superiores,4buscando no el propio interés, sino el de los demás.5Tened entre vosotros los mismos sentimientos que tuvo Cristo Jesús, -
Evangelio
Mateo 21:28-32
28»¿Qué os parece? Un hombre tenía dos hijos; dirigiéndose al primero, le mandó: «Hijo, vete hoy a trabajar en la viña».29Pero él le contestó: «No quiero». Sin embargo se arrepintió después y fue.30Se dirigió entonces al segundo y le dijo lo mismo. Éste le respondió: «Voy, señor»; pero no fue.31¿Cuál de los dos hizo la voluntad del padre?
—El primero —dijeron ellos. Jesús prosiguió: —En verdad os digo que los publicanos y las meretrices van a estar por delante de vosotros en el Reino de Dios.32Porque vino Juan a vosotros con un camino de justicia y no le creísteis; en cambio, los publicanos y las meretrices le creyeron. Pero vosotros, ni siquiera viendo esto os arrepentisteis después para poder creerle.