San Serafín de Montegranaro, Religioso (Memoria)

octubre 12, 2020

Color: Blanco

Lecturas diarias:

  • Primera Lectura

    Gálatas 4:22-24, 26-27, 31--5:1

    4
    22Pues está escrito que Abrahán tuvo dos hijos, uno de la esclava y otro de la libre.
    23Pero el de la esclava nació según la carne; en cambio, el de la libre, en virtud de la promesa.
    24Todo esto tiene un sentido alegórico, porque estas mujeres representan los dos testamentos: uno, el del Monte Sinaí, que engendra esclavos, es Agar.
    26En cambio, la Jerusalén de arriba es libre, y es nuestra madre;
    27pues está escrito:
    Alégrate, estéril, que no das a luz; rompe en gritos de júbilo, tú que no sufres dolores de parto, porque son muchos los hijos de la abandonada, más que los de la que tiene marido.
    31Por tanto, hermanos, no somos hijos de la esclava, sino de la libre.
    5
    1Para esta libertad Cristo nos ha liberado. Manteneos, por eso, firmes, y no os dejéis sujetar de nuevo bajo el yugo de la servidumbre.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 113:1-7

    1¡Aleluya!
    Alabad, siervos del Señor, alabad el Nombre del Señor.
    2Bendito sea el Nombre del Señor,
    ahora y por siempre, sin fin.
    3Desde la salida del sol hasta el ocaso,
    alabado sea el Nombre del Señor.
    4Excelso sobre todas las naciones es el Señor,
    por encima de los cielos está su gloria.
    5¿Quién como el Señor, nuestro Dios,
    que se sienta en las alturas,
    6y se abaja para mirar los cielos y la tierra?
    7Él levanta del polvo al indigente,
    y del estiércol hace subir al mísero,

  • Evangelio

    Lucas 11:29-32

    29Habiéndose reunido una gran muchedumbre, comenzó a decir:
    —Esta generación es una generación perversa; busca una señal y no se le dará otra señal que la de Jonás.
    30Porque, así como Jonás fue señal para los habitantes de Nínive, del mismo modo lo será también el Hijo del Hombre para esta generación.
    31La reina del Sur se levantará en el Juicio contra los hombres de esta generación y los condenará: porque vino de los confines de la tierra para oír la sabiduría de Salomón, y daos cuenta de que aquí hay algo más que Salomón.
    32Los hombres de Nínive se levantarán en el Juicio contra esta generación y la condenarán: porque ellos se convirtieron ante la predicación de Jonás, y daos cuenta de que aquí hay algo más que Jonás.

  • Primera Lectura

    1 Corintios 12:4-11

    4Hay, sí, diversidad de dones, pero el Espíritu es el mismo;
    5y diversidad de ministerios, pero el Señor es el mismo;
    6y diversidad de acciones, pero Dios es el mismo, que obra todo en todos.
    7A cada uno se le concede la manifestación del Espíritu para provecho común:
    8a uno se le concede por el Espíritu palabra de sabiduría, a otro palabra de ciencia según el mismo Espíritu;
    9a uno fe en el mismo Espíritu, a otro don de curaciones en el único Espíritu;
    10a uno poder de obrar milagros, a otro profecía, a otro discernimiento de espíritus; a uno diversidad de lenguas, a otro interpretación de lenguas.
    11Pero todas estas cosas las realiza el mismo y único Espíritu, que las distribuye a cada uno según quiere.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 98:1-4

    1Salmo.
    Cantad al Señor un cántico nuevo porque ha hecho maravillas. Su diestra le ha salvado, su santo brazo.
    2El Señor ha dado a conocer su salvación;
    ha revelado su justicia a los ojos de las naciones.
    3Se acordó de su misericordia y fidelidad
    con la casa de Israel. Todos los confines de la tierra han visto la salvación de nuestro Dios.
    4Aclamad al Señor, la tierra entera;
    gritad, cantad, entonad salmos.

  • Evangelio

    Mateo 18:1-5

    1En aquella ocasión se acercaron los discípulos a Jesús y le preguntaron:
    —¿Quién es pues el mayor en el Reino de los Cielos?
    2Entonces llamó a un niño, lo puso en medio de ellos
    3y dijo:
    —En verdad os digo: si no os convertís y os hacéis como los niños, no entraréis en el Reino de los Cielos.
    4Pues todo el que se humille como este niño, ése es el mayor en el Reino de los Cielos;
    5y el que reciba a un niño como éste en mi nombre, a mí me recibe.