San Blas, Obispo y Mártir (Memoria Libre)

febrero 3, 2012

Color: Rojo

Lecturas diarias:

  • Primera Lectura

    Eclesiástico 47:2-11

    2Como enjundia separada en sacrificio pacífico,
    así lo fue David entre los hijos de Israel.
    3Jugó con leones como si fueran cabritos,
    y con osos, como si fueran corderos.
    4En su juventud, ¿no mató al gigante
    y quitó el oprobio del pueblo,
    5al girar la piedra con la honda
    y abatir la arrogancia de Goliat?
    6Invocó al Dios Altísimo,
    que le puso fuerza en su diestra para eliminar a un fuerte guerrero y levantar el poder de su pueblo.
    7Así le dieron gloria por los diez mil,
    le alabaron con las bendiciones del Señor y le ofrecieron la corona de gloria.
    8Quebrantó por doquier a los enemigos;
    humilló a los adversarios filisteos, destrozó su poder hasta el día de hoy.
    9En todas sus acciones daba gracias
    al Santo Altísimo con palabras gloriosas;
    10le entonó cánticos con todo su corazón
    y amó a Dios, su Creador.
    11Dispuso los coros de salmistas ante el altar,
    y con sus sonidos hizo armonioso el canto.
    12Confirió esplendor a las celebraciones,
    embelleció el ciclo de solemnidades hasta el fin de año, mandó alabar el Nombre santo del Señor y que el Santuario resonase desde el amanecer.
    13El Señor le perdonó sus pecados,
    ensalzó su poder para siempre, le concedió el testamento regio y un trono de gloria en Israel.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 18:31, 47, 50-51

    31El camino de Dios es íntegro,
    la palabra del Señor, probada a fuego. Él es escudo para los que a Él se acogen.
    47¡Viva el Señor! ¡Bendita sea mi Roca!
    ¡Exaltado sea el Dios de mi salvación!
    50Por eso, ¡Señor!, te alabaré entre las gentes,
    y cantaré en honor de tu Nombre.
    51Él hace grandes las victorias de su rey
    y tiene misericordia de su Ungido, de David y su descendencia por siempre. 

  • Evangelio

    Marcos 6:14-29

    14Llegó esto a oídos del rey Herodes, pues su nombre se había hecho famoso, y decía:
    —Juan el Bautista ha resucitado de entre los muertos, y por eso actúan en él unos poderes.
    15Otros decían:
    —Es Elías. Otros, en fin, decían: —Es un profeta, igual que los demás profetas.
    16Pero cuando lo oyó Herodes decía:
    —Éste es Juan, a quien yo decapité, que ha resucitado.
    17En efecto, el propio Herodes había mandado apresar a Juan y le había encadenado en la cárcel a causa de Herodías, la mujer de su hermano Filipo; porque se había casado con ella
    18y Juan le decía a Herodes: «No te es lícito tener a la mujer de tu hermano».
    19Herodías le odiaba y quería matarlo, pero no podía:
    20porque Herodes tenía miedo de Juan, ya que se daba cuenta de que era un hombre justo y santo. Y le protegía y al oírlo le entraban muchas dudas; y le escuchaba con gusto.
    21Cuando llegó un día propicio, en el que Herodes por su cumpleaños dio un banquete a sus magnates, a los tribunos y a los principales de Galilea,
    22entró la hija de la propia Herodías, bailó y gustó a Herodes y a los que con él estaban a la mesa. Le dijo el rey a la muchacha:
    —Pídeme lo que quieras y te lo daré.
    23Y le juró varias veces:
    —Cualquier cosa que me pidas te daré, aunque sea la mitad de mi reino.
    24Y, saliendo, le dijo a su madre:
    —¿Qué le pido? —La cabeza de Juan el Bautista —contestó ella.
    25Y al instante, entrando deprisa donde estaba el rey, le pidió:
    —Quiero que enseguida me des en una bandeja la cabeza de Juan el Bautista.
    26El rey se entristeció, pero por el juramento y por los comensales no quiso contrariarla.
    27Y enseguida el rey envió a un verdugo con la orden de traer su cabeza. Éste se marchó, lo decapitó en la cárcel
    28y trajo su cabeza en una bandeja, y se la dio a la muchacha y la muchacha la entregó a su madre.
    29Cuando se enteraron sus discípulos, vinieron, tomaron su cuerpo muerto y lo pusieron en un sepulcro.

  • Primera Lectura

    Romanos 5:1-5

    1Justificados, por tanto, por la fe, estamos en paz con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo,
    2por quien también tenemos acceso en virtud de la fe a esta gracia en la que permanecemos, y nos gloriamos apoyados en la esperanza de la gloria de Dios.
    3Pero no sólo esto: también nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce la paciencia;
    4la paciencia, la virtud probada; la virtud probada, la esperanza.
    5Una esperanza que no defrauda, porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por medio del Espíritu Santo que se nos ha dado.

  • Salmo Responsorial

    Salmo 117:1-2

    1¡Aleluya!
    Alabad al Señor todas las naciones, aclamadlo todos los pueblos.
    2Porque firme es con nosotros su misericordia,
    la fidelidad del Señor permanece para siempre. 

  • Evangelio

    Marcos 16:15-20

    15Y les dijo:
    —Id al mundo entero y predicad el Evangelio a todo lo creado.
    16El que crea y sea bautizado será salvado; pero el que no crea será condenado.
    17A los que crean acompañarán estos signos: en mi nombre expulsarán demonios, hablarán lenguas nuevas,
    18agarrarán serpientes con las manos y, si bebieran algún veneno, no les dañará; impondrán las manos sobre los enfermos y quedarán curados.
    19El Señor, Jesús, después de hablarles, se elevó al cielo y está sentado a la derecha de Dios.
    20Y ellos, partiendo de allí, predicaron por todas partes, y el Señor cooperaba y confirmaba la palabra con los milagros que la acompañaban.