El Arzobispo de Milán (Italia), Cardenal Angelo Scola, leyó este viernes la homilía que el Papa Francisco iba a pronunciar durante la Misa en la iglesia del Hospital Agostino Gemelli, donde destaca la labor de los médicos y enfermeros que, con su profesionalismo y competencia, están llevando “un poco del amor del Corazón de Cristo” a los enfermos.
“Dios está esperando por nosotros”, expresó el Papa Francisco durante la Misa matutina en la Casa Santa Marta, donde invitó a los fieles a ser pequeños de corazón para poder comprender el amor de Dios, que está buscando tener una “relación de papá-hijo” para decirnos “estoy contigo”.
Durante la Audiencia General de este miércoles, el Papa Francisco reflexionó sobre el don de la piedad, el cual no significa tener compasión, poner “cara de estampita” o fingir ser santo, sino un “auténtico espíritu religioso, de confianza filial con Dios, de aquella capacidad de rezarle con amor y sencillez que caracteriza a los humildes de corazón”.