Gaudi: Parc Güel

Proyecto inmobiliario promovido por Eusebi Güell i Bacigalupi que encargó a Gaudí la urbanización de 15 hectáreas de terreno situadas en el barrio de la Salut de Gràcia, al norte de Barcelona, en una zona conocida como "la muntanya pelada". El proyecto contemplaba un espacio residencial de carácter privado al gusto anglosajón de las "ciudades jardín" (de ahí el nombre inglés park inscrito en su entrada principal). El conjunto constaba de dos pabellones de entrada, una monumental escalinata, un mercado, un teatro y sesenta parcelas con jardín.

Finalmente, el proyecto de Güell se frustró: de las sesenta casas posibles sólo se construyeron un par, sumándose a una tercera preexistente, la casa Larrard, que Eusebi Güell había adquirido al comprar los terrenos y que convirtió en su residencia. Las dos restantes fueron construidas por Francesc Berenguer i Mestres como casa de muestra en el año 1902 y por Juli Batllevell i Arús para el abogado Martí Trias i Domènech en el año 1903. A pesar de que la primera se puso a la venta cuando fue terminada, en 1906 todavía no tenía propietario, lo que impulsó a Gaudí a adquirirla y establecer su residencia, compartiéndola con su padre y su sobrina. Tras la muerte de dichos familiares, Gaudí abandonó la casa para instalarse definitivamente en una construcción provisional de la Sagrada Familia. En el año 1960 fue adquirida por la asociación Amics de Gaudí, que la reabrió tres años más tarde como Casa-Museo Antoni Gaudí, consagrada a proteger y perpetuar la obra del arquitecto.

El Parc Güell comenzó a edificarse en el año 1900, con la excavación del terreno y el movimiento de tierras. Luego se construyeron los viaductos, calles, parcelas y un muro perimetral junto a los pabellones de entrada, finalizados en 1903. Parte de la piedra producto de las excavaciones se utilizó posteriormente en labores de fábrica, como en los pilares de los viaductos o los muros de contención, lo que demuestra la complicidad entre naturaleza y arquitectura que Gaudí supo coordinar en perfecta sintonía.

La entrada al parque se efectúa desde los pabellones destinados a portería y servicios. Este último posee una torre mirador de estructura hiperboloide rematada por una cruz de cuatro brazos, con trencadís cerámico blanco. También aparece trencadís cerámico en la cubierta pero la coloración y las formas reproducen las de la escalera principal. Se trata de una doble escalinata, dividida en tres tramos en los que se representan animales que Gaudí extrae del mundo simbólico. La escalera conduce a la llamada sala hipóstila, un espacio destinado a mercado con 86 columnas que sostienen la gran plaza que alberga el teatro griego. Dichas columnas están huecas y presentan la particularidad de recoger y filtrar el agua que la lluvia deposita en la plaza superior, y de conducirla a una cisterna dond se almacena antes de ser utilizada para regar los jardines. En la plaza se halla una barandilla que sirve de banco. Está rematada con trencadís cerámico y sorprende tanto por su coloración como por su original composición.

Los pórticos y viaductos del parque fueron realizados de manera prefabricada, a partir de pilares de ladrillo revestidos de piedra procedente del propio lugar. Hay que destacar que Gaudí incorpora en dichos viaductos columnas inclinadas, solución que utilizará posteriormente en la cripta de la Colonia Güell.

Junto al proyecto urbanístico y constructivo, Gaudí se encargó también de la vegetación del recinto, conservando la flora original y plantando algarrobos y palmeras, glicinas y romero, entre otras plantas.

Con el tiempo, el parque albergó múltiples actividades de carácter cultural, lúdico y festivo, pero al morir Eusebi Güell en 1918 sin que se hubiera cumplido el objetivo comercial de la ciudad-jardín, sus herederos decidieron venderlo al Ayuntamiento de Barcelona, abriéndose al público en el año 1923. A pesar de haber sido restaurado varias veces, la reforma más importante se efectuó en 1995 por parte de los arquitectos Elies Torres y J. A. Martínez Lapeña.

El Parc Güell, obra urbanística capital de Gaudí, la más ambiciosa y avanzada de acuerdo con el urbanismo moderno de su tiempo, fue declarado Monumento histórico-artístico de Interés Nacional en 1969 y Patrimonio Mundial por la UNESCO en 1984.