Entrevista a Mons. Andrés Stanovnik, Secretario General del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) y Obispo de Reconquista, Argentina.

Aparecida 2007
Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe
del 13 al 31 de mayo del 2007 · Aparecida - Brasil
Visita del Papa
del 9 al 13 de mayo del 2007



El pasado 31 de marzo, ACI Prensa diálogo con Mons. Stanovnik sobre el reciente Documento de Síntesis de los aportes entregados por las distintas conferencias episcopales de América Latina para la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe. Este importante acontecimiento eclesial se celebrará del 13 al 31 de mayo en el Santuario Mariano de Aparecida, en Brasil, y será inaugurado por el Papa Benedicto XVI. A continuación transcribimos la entrevista realizada con el Prelado argentino:

ACI Prensa: ¿Cuáles son las claves de lectura del Documento de Síntesis de la V
Conferencia publicado recientemente?


Mons. Stanovnik: Primero de lo que se trata en este texto es de una síntesis de los aportes recibidos para la V Conferencia, esto es importante recalcarlo porque se trató de recoger las tendencias más importantes que surgieron de los aportes, de la reflexión que han hecho las 22 Conferencias Episcopales a través de sus diócesis, comunidades y también a otros niveles más intelectuales sobre el tema de la V Conferencia “ Discípulos y Misioneros de Jesucristo para que nuestros Pueblos en Él tengan Vida” tema que nos dio el Papa Benedicto XVI  al que agregó también una cita evangélica  muy significativa “Yo soy El Camino, La Verdad y La Vida”. Entonces, la síntesis recoge el aporte de la reflexión de nuestras comunidades de América Latina sobre este tema.

Las claves fácilmente pueden detectarse en los primeros números del documento porque es bastante didáctico, de manera que en la primera parte explica el contenido del documento, el método que se utiliza y fundamentalmente consta de tres capítulos, con una introducción y una conclusión
En el primer capítulo se trata de ofrecer orientaciones y criterios para ver como nosotros miramos nuestros pueblos a la luz del proyecto del Padre, esto nos permite tener una mirada creyente sobre la sociedad que nos toca vivir, sobre nuestra sociedad latinoamericana,  señalamos algunos rostros concretos que hoy nos interpelan y anotamos también algunos rasgos sobresalientes del cambio de época, que ya lo había señalado el Papa Benedicto XVI en un discurso en enero de este año a la Pontificia Comisión  de América Latina, y nos detenemos también en algunos contrastes de la propia Iglesia y desafíos que nos viene de nuestra sociedad. De modo que el primer capítulo es tratar de ver, con ojos de creyentes el tiempo presente que nos toca vivir.

En ese ver, hay un discernimiento que se profundiza después en el segundo capítulo. Nosotros miramos desde la persona de Jesús, nuestra fe se apoya en la experiencia muy fuerte, conmovedora del encuentro con Jesucristo de manera que nosotros vemos la realidad con Él. Si queremos usar esa hermosa fórmula Eucarística:  “Nosotros vemos por Él, con Él y en Él”; de modo que es una mirada que parte de una Alianza y por consiguiente, el juicio, el discernimiento de la realidad que nos toca vivir la hacemos a partir de  estas categorías y desde esta experiencia de alianza y de comunión.

Una tercera clave para entender este documento, que es el tercer capítulo que se ocupa de la actuación evangelizadora. La V Conferencia como las cuatro anteriores tiene como meta, como objetivo la evangelización, es decir, la proclamación del mensaje de Jesús, esa es la finalidad de la Iglesia.
Por consiguiente el cuarto capítulo esta dedicado a este aspecto, a la actuación evangelizadora de la Iglesia. Esta presentado, por supuesto, desde el Espíritu Santo que convoca a todos los miembros para la misión y se inspira en la vida de la Virgen María, de los apóstoles y de los santos. Esto suscita en el Pueblo de Dios una espiritualidad misionera.

Nosotros quisiéramos que esta V Conferencia tuviera un fuerte impulso misionero, no quisiéramos que terminará simplemente en la celebración de la V Conferencia, tampoco solo en un documento, sino que la celebración y la reflexión que vamos a realizar los pastores en Aparecida desemboque en un impulso misionero, muy concretamente en una misión en el continente.

ACI Prensa: Si pudiéramos especificar los aportes más importantes que han enviado  las diferentes Conferencias Episcopales y  Diócesis ¿cuáles serían?

Mons. Stanovnik: En primer lugar cómo viven su fe. Nosotros queríamos recoger de nuestras comunidades la experiencia de fe, es decir como están viviendo su fe y su misión en medio de los desafíos que nos toca vivir en estos momentos. Como hoy, nuestra comunidad capta su experiencia de fe y como discierne los desafíos de este momento histórico, de este tiempo que esta marcado fuertemente por un cambio cultural como lo señaló el Papa Benedicto VXI.

ACI Prensa: ¿Cuál es la importancia que tiene este Documento?

Mons. Stanovnik: El hecho de haber recogido los aportes de la vivencia del Pueblo de Dios de su reflexión sobre su propia fe y sus desafíos, este documento significa una inspiración muy fuerte y una referencia de consulta cualificada para el participante que va a trabajar y reflexionar en la V Conferencia. Creemos que va a ser el gran documento de consulta  para los  participantes.

ACI Prensa: Entonces, ¿En torno a este documento se va a reflexionar y plantear los lineamientos para el futuro de la Iglesia en América Latina?

Mons. Stanovnik: Sí, para el futuro inmediato. Como decía, la V Conferencia no solo quiere ser un momento reflexivo de la Iglesia, quiere abrirse también generosamente a la misión. La iglesia es en el mundo para la misión. Por eso, al reunirse de un modo extraordinario a través de sus pastores como lo hace ahora en Aparecida, la finalidad es tratar de responder con más generosidad a la voluntad de Dios en este momento histórico. Por eso se trata de discernir, de tratar de ver cuales son los principales desafíos que nos presenta este momento histórico para responder desde los criterios evangélicos, desde el mensaje que hemos recibido de Jesús y que tenemos la gracia de vivirlo y celebrarlo y el mandato de comunicarlo por el testimonio a la sociedad y en la sociedad en la que nos toca vivir. 

ACI Prensa: Se  habla de una “gran misión continental”, ¿En qué va a consistir?

Mons. Stanovnik: No la podemos prever, porque la asamblea es la que tiene que dar las pautas y decir en que va a consistir, es decir, como se va a proyectar esta misión continental.
Nosotros hemos recogido todo este año aportes y figura en este documento de síntesis el deseo del Pueblo de Dios de vivir más intensamente este mandato misionero. Esto lo recogemos, los pastores lo van a asumir en Aparecida y van a dar lineamientos concretos. Hay que esperar para ver de que manera se van a proyectar estos lineamientos pastorales para la misión en el continente.
Habrá que estar atentos a los acontecimientos de la V Conferencia y a sus resultados para  a partir de allí ver cuales son estas grandes orientaciones que va a tener la Iglesia en América Latina en los próximos años marcada fuertemente por la Misión.

ACI Prensa: Si bien van a participar delegaciones de las diferentes Conferencias Episcopales  de América Latina ¿cómo podemos participar los laicos antes y durante la V Conferencia?

Mons. Stanovnik: Antes de su desarrollo han participado activamente. El resultado de esta participación quedó plasmado en este Documento de Síntesis. Pero por supuesto que la participación fue mucho más allá, dio otros frutos que a veces es difícil contabilizar. Basta pensar todo lo que significó la movilización del Pueblo de Dios al reunirse para orar y reflexionar sobre el tema que nos entregó el Papa Benedicto XVI  “Discípulos y Misioneros de Jesucristo; para que nuestros Pueblos en Él tengan Vida”, lo que significó para tantas comunidades de América Latina volver a reflexionar sobre el discipulado, es decir, volver a pensarse así mismos en relación personal, íntima de comunión de vida y de amistad con Jesucristo, de alguna manera volver a sentirnos llamados por Él a estar con Él, para escuchar de Él el envío a la misión, esto fue una riqueza increíble, significó participación porque esta reflexión se ha entregado a quienes tuvimos en el mes de enero la tarea de recoger toda esta síntesis y llevarla a todos los que van a participar en el encuentro de Aparecida.

Esto fue un modo activo, amplio, vital  de participar en este acontecimiento de la V Conferencia que no se reduce solo a los 19 días de Aparecida, no se reduce solo del 13 de mayo al 31 de Mayo, sino que viene recogiendo todo el movimiento del Pueblo de Dios por más de un año convocado a reflexionar y a orar y al mismo tiempo, sigue estando convocado porque les hemos pedido a todos que nos acompañaran durante el desarrollo de la V Conferencia fundamentalmente con la oración. Hay propuestas muy interesantes que están entregadas a las comunidades a través de la página www.celam.info, celebraciones por medio de las cuales durante los días de la V Conferencia las comunidades de América Latina pueden reunirse para orar, para que este acontecimiento sea fecundo espiritualmente; otro modo de participar es estar conectado con el acontecimiento a través de los medios; y justamente por la bondad y la tecnología de los medios de comunicación va a estar trasmitida en tiempo real diariamente con partes de comunicación sobre el desarrollo paso a paso que va a ir teniendo la reflexión de los pastores. Por supuesto que la Eucaristía diaria de la asamblea de la V Conferencia, que se va a celebrar en el altar mayor de la Basílica de Nuestra Señora de Aparecida, va a estar trasmitida por televisión vía satélite, de manera que todo aquel que quiera unirse a través de la imagen va a poder participar y estar al tanto del desarrollo de este acontecimiento de manera muy cercana.

ACI Prensa: ¿Qué espera la Iglesia de América Latina de la V Conferencia?

Mons. Stanovnik: Nosotros quisiéramos que la Iglesia, que cada uno de nosotros, cada cristiano, cada bautizado, quisiéramos vivir con mayor generosidad, apertura, con mayor fidelidad y entusiasmo nuestra identidad de bautizados. El Papa no propone que lo vivamos desde esta perspectiva de discípulos y misioneros de Jesucristo. De modo que queremos que la V Conferencia nos ayudara a comprender la belleza que tiene esta propuesta cristiana.

Ya entonces en la 1era frase del tema, hay toda una propuesta hermosísima y entusiasmante  para vivir nuestra relación con Dios, descubrir nuestra identidad de discípulos y amigos de Jesús y con Él sentirnos de nuevo y con su fuerza transformadora enviados a la misión, para que nuestros pueblos en Él tengan vida. Esta nuestra identidad, nos es para quedarnos cerrados en nuestras comunidades sino la Iglesia es para la misión, es decir, tiene un mensaje de vida y de humanidad extraordinario.

Quisiéramos poder vivirlo con la intensidad suficiente para que realmente sea un impacto y un atractivo de humanización para la sociedad que nos toca vivir, para que realmente esta comunidad humana, esta familia de naciones que vivimos en América Latina pueda vivir más equitativamente, más fraternalmente, creando mayores y más amplios espacios de encuentro, diálogo, solidaridad, unidad entre los pueblos; esa es la gran propuesta que tenemos.

Nosotros creemos que éste es el camino para construir el Reino de Dios que se hace presente de un modo significativa en la Iglesia, pero que se extiende más allá. Nosotros sabemos que este proyecto de familia humana que se construye a través de la relación discipular con Jesucristo en la comunidad, es el sueño de Dios, es decir lo que Dios sueña y nos lo propone para que seamos realmente imagen y semejanza suya. Él es Trinidad, es Comunión y quisiera también que la familia humana sea cada vez más como Él para encontrarnos al final de la historia en un abrazo de amor con Él.  Esta construcción a la que no llama, esta misión es maravillosa.

Quisiera finalizar, como estamos en las vísperas de la Semana Santa, este camino para crear la comunión, la fraternidad, la familia humana, la comunidad de naciones, nosotros creyentes estamos convencido que el camino es Jesucristo, es decir, Jesucristo con su propuesta de Pasión, Muerte y Resurrección nos invita a entrar por este camino de amistad con Él: es decir recorrer, asumir, el camino penitencial que significa de conversión, de convertirnos al amor de Dios para poder construir esta familia humana y caminar juntos y  con Él hacia Dios Padre.

Quisiera terminar recordando que esta V Conferencia se va a celebrar en Aparecida que es un Santuario Mariano, por eso quisiera aprovechar para invitar a todos, creyentes, bautizados, católicos, pero también a todos los hombres y mujeres de buena voluntad, incluso a los hermanos y hermanas de otras confesiones cristianas que nos acompañen con su oración; y de un modo especial al creyente católico que le pidamos a María, Estrella de la Evangelización que guíe con su intercesión maternal a todas las comunidades eclesiales de América Latina y el Caribe y que nos asista en la reflexión durante los días de la V Conferencia para que descubramos la voz de Dios,  los signos de los tiempos, podamos discernir lo que Él quiere para nosotros y nosotros  tengamos también la valentía y generosidad para responderle.