El Obispo de El Paso en el estado de Texas (Estados Unidos), Mons. Mark J. Seitz, recordó que Dios envió a su Hijo al mundo para "enfrentar el mal diabólico", como el del tiroteo ocurrido el 3 de agosto en una tienda de Walmart, que dejó 22 fallecidos y 24 heridos.
"Fue precisamente para enfrentar este mal diabólico que Dios envió a su Hijo al mundo. Fue para entrar en medio de esto y experimentar toda su fuerza que el inocente, Jesús, experimentó su pasión y su cruz. Justo cuando parecía que el mal había ganado el día que Cristo salió victorioso. Esta es mi esperanza para todos los que han sufrido esta violencia hoy y para nuestra comunidad", indicó el Prelado en una declaración publicada este lunes 5 de agosto en español en la cuenta de Twitter de la Diócesis de El Paso.
El sábado 3 de agosto, un hombre identificado como Patrick Crusius ingresó a una tienda de Walmart en El Paso y disparó contra quienes estaban allí, dejando numerosas víctimas entre las cuales había varios mexicanos.