Rosa María Payá: Es fundamental un plebiscito para romper el totalitarismo en Cuba

La comunidad internacional anda más pendiente de las exigencias del régimen comunista que de las demandas democráticas del pueblo cubano, señaló Rosa María Payá, promotora de la iniciativa ciudadana Cuba Decide, quien indicó que la realización de un plebiscito vinculante es fundamental "para romper el totalitarismo e iniciar un proceso de transición" democrática en la isla.

En declaraciones al programa Voces de Cuba, la hija del fallecido Oswaldo Payá Sardiñas recordó la formación católica que recibió en su familia y que inspiró a sus padres a fundar el Movimiento Cristiano Liberación en 1988. "El MCL es la escuela en la que nos hemos formado muchos. No solo los miembros del MCL, sino también muchas personas que se movieron alrededor de nosotros, que trabajaron en la campaña del Proyecto Varela, que trabajaron en las otras campañas".

En ese sentido, indicó que la iniciativa Cuba Decide "da continuidad al Proyecto Varela, pero que no se lanza desde una posición política, no se lanza desde un movimiento político, sino desde lo que quiere ser una plataforma ciudadana en la que caben todos" los cubanos.

"Yo sí sigo siendo miembro del MCL, pero mi trabajo en Cuba Decide es un trabajo totalmente ciudadano, es un trabajo porque se le pregunte a los cubanos si quieren un proceso de elecciones libres y plurales después de más de 67 años", explicó.

Por ello, indicó que es "fundamental el paso del plebiscito para, en primer lugar, poner en esta ecuación la variable de la participación ciudadana, que es fundamental para romper el totalitarismo y para iniciar un proceso de transición". "Nos parece también esencial que los cubanos puedan realmente decidir por primera vez en mucho tiempo qué es lo que quieren y sean sujetos de su propia historia, que dejen de decidir por los cubanos".

En ese sentido, dijo que presentaron Cuba Decide en el marco de la Cumbre de las Américas realizada en Panamá en abril pasado -y que representó la primera participación de Cuba desde su suspensión de la OEA en 1962-, "para recordar que el estado cubano no es solamente el gobierno cubano", sino también los ciudadanos que hasta el día de hoy se han "quedado fuera de las conversaciones con el resto del mundo".

"Cuando digo esto no es porque haya estado fuera del discurso el hecho del respeto a los derechos humanos y otras frases que de vez en cuando se dicen cuando se trata con el gobierno cubano. Lo digo muy concretamente porque cuando vemos los pasos que desde la comunidad internacional se dan para con el gobierno cubano, son pasos en función de cumplir con las condiciones y los requerimientos del gobierno cubano".

"Lo que hay concreto, no solamente de parte de la administración de los Estados Unidos, sino también de parte de la OEA", indicó, es que "hasta ahora la comunidad internacional parece preocupada por cumplir con las condiciones del gobierno cubano, no así con las demandas de la ciudadanía cubana".

Rosa María señaló que estas demandas "han sido muy concretas" y están en el Proyecto Varela, respaldado por miles de cubanos que "han pedido libertad de expresión, han pedido libertad de asociación, amnistía para los presos políticos, tener empresas privadas reales y elecciones libres". "No hemos escuchado esas invitaciones al estado cubano de parte de la comunidad internacional. Por eso los invitamos ahora a que sean valientes", expresó.

Reconocimiento de la verdad

Durante la entrevista, la joven líder disidente también recordó "el atentado" que acabó con las vidas de su padre, Oswaldo Payá, y de Harold Cepero el 22 de julio de 2012, cuando iban hacia el oriente de Cuba para promover el Camino del Pueblo, plataforma ciudadana promovida por el MCL para impulsar el plebiscito.

Rosa María recordó la necesidad de una investigación que aclaré las muertes de ambos disidentes.

"El reconocimiento de toda la verdad es fundamental en lo personal y también en el proceso de reconciliación y de transición a la democracia que nuestro país necesita. Eso pasa por esclarecer las circunstancias de la muerte de mi padre y de Harold".

"Eso pasa por buscar la justicia, no solamente en el caso del atentado contra ellos, sino en el caso de todas las víctimas del régimen cubano. Pasa también por encontrar caminos de transición en las cuales podamos participar todos", afirmó.