El Papa Francisco aseguró hoy que la frontera entre el bien y el mal no pasa fuera sino dentro de nosotros, y alentó a tener "un corazón libre de hipocresía", en sus palabras previas al rezo del Ángelus dominical en la Plaza de San Pedro en el Vaticano.
Ante los miles de fieles y peregrinos congregados para acompañarlo en el rezo de la oración mariana, el Santo Padre subrayó que "la frontera entre el bien y el mal no pasa fuera de nosotros sino más bien dentro de nosotros. Podemos preguntarnos: ¿dónde está mi corazón? Jesús decía: 'tu tesoro está donde está tu corazón'. ¿Cuál es mi tesoro? ¿Es Jesús y su doctrina? Entonces el corazón es bueno".
Si nuestro tesoro no es Jesús "es el corazón el que debe ser purificado y debe convertirse", aseguró.