La Santa Sede ha hecho pública hoy la decisión del Papa Francisco de constituir un Colegio especial para el estudio de los recursos de apelación contra sentencias condenatorias por delitos graves (delicta graviora) cometidos por miembros del clero, que hará parte de la Congregación para la Doctrina de la Fe.
El objetivo de este nuevo órgano será garantizar la rapidez de los procesos y estará formado por 7 cardenales u obispos, sin necesidad de que pertenezcan a la mencionada congregación, pero que serán nombrados directamente por el Santo Padre.
El Pontífice ha establecido además que "en el caso de que el reo posea la dignidad episcopal, su recurso será examinado por la Sesión Ordinaria -conocida como Feria IV- que también podrá decidir casos particulares según el juicio del Papa".