12 de febrero de 2022 / 02:28 PM
El Arzobispo de Guayaquil, Mons. Luis Cabrera, presidió este sábado 12 de febrero una Misa en la que acogió la campana llamada "La Voz de los No Nacidos", que el Papa Francisco bendijo en octubre y que llega a Ecuador en medio del debate de un proyecto de ley sobre el aborto por violación.
"No somos dioses para decidir quién vive y quién muere", dijo el Arzobispo en la homilía de la Misa que presidió esta mañana en la Catedral de Guayaquil.
"El secularismo, bajo el concepto de Estado Laico, ha ido destruyendo la conciencia religiosa; poco a poco nos han convencido que cada uno es un dios, capaz de hacer de su vida lo que quisiera, sin que importen los más pequeños y débiles", explicó el Prelado ecuatoriano.