Esta semana se presentó en el Brazo de Carlos Magno del Vaticano la muestra "La metamorfosis del espacio", en la que se exponen 143 esculturas, maquetas y dibujos del polifacético arquitecto español Santiago Calatrava.

"Hemos visto que el trabajo de Calatrava no se limita a la arquitectura, sino a ámbitos también muy complejos, esto ha entusiasmado al Vaticano, quien en los últimos años se está preocupando de la posibilidad de hablar con los artistas más directos, abriéndose a la fotografía, el video, y géneros artísticos que hasta ahora no habían entrado en el diálogo con la cultura y la tradición de los Museos Vaticanos", explicó en declaraciones a ACI Prensa la responsable de Arte Contemporáneo de los Museos Vaticanos, Micol Forti.

La exposición es gratuita, está promovida por el Pontificio Consejo para la Cultura, liderado por el Cardenal italiano Gianfranco Ravasi, y estará disponible al público del 4 de diciembre al 20 de febrero de 2014. Calatrava, de 62 años, es uno de los más famosos arquitectos contemporáneos y su especialidad son las grandes estructuras.

La muestra expone modelos arquitectónicos, acompañados por los dibujos preparatorios y una serie de acuarelas de cada proyecto así como esculturas, tanto monumentales como de formato más reducido de bronce, mármol, alabastro y madera.

Destaca el gran modelo arquitectónico de la iglesia greco-ortodoxa de San Nicolás, proyectada para Zona Cero de Nueva York (Estados Unidos), que tiene al lado acuarelas del arquitecto con estudios de los mosaicos y las cúpulas de Santa Sofía en Estambul, el arco dibujado por una hoja de palma o el rostro de Cristo, modelo ideal para la iglesia de planta central.

También figura el modelo del proyecto de la catedral de San Juan el Divino, también en Nueva York, cuya grandiosidad contrasta con el modelo de la Capilla de Los Ángeles (Estados Unidos), en forma de la típica tienda de los poblados indios, dedicada al misionero franciscano Fray Junípero Serra.

La tienda, primera iglesia de la comunidad de franciscanos en el sur de California, ha servido de modelo para una capilla inmersa en el espacio, en el agua y en el aire, y su significado es abatir cualquier frontera física entre el espacio sacro y el colectivo.