Una multitudinaria peregrinación por la paz y la consagración de Nicaragua al Inmaculado Corazón de María tuvo lugar ayer sábado 28 en Managua, donde también se pidió por las decenas de muertos que dejó la violencia que sacudió el país hace unos días.
Portando rosarios y banderas de Nicaragua, los miles de fieles partieron desde el Colegio Teresiano hasta el atrio de la Catedral de Managua, donde el Arzobispo local, Cardenal Leopoldo Brenes, realizó la liturgia de la Palabra. La consagración estuvo a cargo del Obispo Auxiliar, Mons. Silvio Báez.