La Arquidiócesis de Puebla (México) dio una serie de consejos para vestir correctamente a la imagen del Niño Dios durante la Fiesta de la Candelaria.
Cada 2 de febrero, la Iglesia Católica celebra la advocación mariana de Nuestra Señora de la Candelaria.
Esta fiesta tuvo su origen en Tenerife (España), en el marco de la celebración de la Purificación de la Virgen María tras el parto, y al llegar a América se enriqueció con costumbres propias de cada país.
Por ejemplo, en México y en algunos otros países se tiene la tradición de vestir una imagen del Niño Dios con prendas especiales para ser bendecido en la iglesia durante la Misa.
Sin embargo, debido a los excesos cometidos al realizar esta práctica, la Arquidiócesis de Puebla publicó en su cuenta de Facebook algunos "consejos para vestir a tu Niño Dios en la próxima Fiesta de la Candelaria".
En primer lugar, la Arquidiócesis recuerda a los fieles que esta costumbre "no forma parte de la liturgia de la Iglesia".
"Se trata de una tradición popular para expresar cariño y gratitud", explicó en su página de Facebook.
Además, hace notar que se trata de "una imagen de Dios, por lo que hay que vestirlo con mucho respeto".
La Arquidiócesis recomienda cubrir al Niño con ropa blanca o de alguna advocación de Jesús como el Sagrado Corazón, el Señor de la Misericordia, el Buen Pastor o Cristo Rey.
A su vez, explica que es incorrecto vestir al Niño de ángel, Papa, obispo o cualquier otro personaje que no sea Jesús.
La Arquidiócesis mexicana hace hincapié en que "no es necesario cambiarle de vestimenta cada año".
"Si queremos ponerle un vestido digno y verdaderamente bello, valdría la pena hacerle uno solo y mantenerlo limpio y presentable", explicó.
Si decides ayudarnos, ten la certeza que te lo agradeceremos de corazón.
Una escultura quiteña del Niño Jesús fue devuelta al Museo de Arte Colonial de San Francisco en Santiago de Chile, el pasado 28 de enero.
La artista Paula Sáenz Soto regaló al Papa Francisco un libro sobre la Virgen de los Ángeles, Patrona de Costa Rica y una especial figura de un borrico.
El Obispo de Córdoba (España), Mons. Demetrio Fernández, invita a los fieles a contemplar en la Virgen María “lo que toda persona humana está llamada a ser”, porque además de ser “modelo de vida humana divinizada, ella es nuestra madre”.
