25 de noviembre de 2019 / 02:47 AM
Este 25 de noviembre el Papa Francisco celebró una Misa en el Tokio Dome de Japón en la que reiteró su llamado a que la Iglesia se convierta en un hospital de campaña que proteja toda vida y dé testimonio de compasión y escucha simple en una sociedad donde las exigencias hace que no sean pocas las personas que viven socialmente aisladas, incapaces de comprender el significado de la vida y de su propia existencia.
A continuación la homilía completa del Papa Francisco:
El evangelio que hemos escuchado es parte del primer gran sermón de Jesús; lo conocemos como el "Sermón de la montaña" y nos describe la belleza del camino que estamos invitados a transitar. Según la Biblia, la montaña es el lugar donde Dios se manifiesta y se da a conocer: «Sube hacia mí», le dijo Dios a Moisés (cf. Ex 24,1). Una montaña donde la cima no se alcanza con voluntarismo ni "carrerismo" sino tan sólo con la atenta, paciente y delicada escucha del Maestro en medio de las encrucijadas del camino. La cima se hace llanura para regalarnos una perspectiva siempre nueva de todo lo que nos rodea, centrada en la compasión del Padre. En Jesús encontramos la cima de lo que significa ser humanos y nos muestra el camino que nos conduce a la plenitud capaz de desbordar todos los cálculos conocidos; en Él encontramos una vida nueva donde experimentar la libertad de sabernos hijos amados.