Los familiares de los 33 mineros que permanecen atrapados a 700 metros bajo tierra en una mina de Atacama agradecieron las palabras de apoyo que el Papa Benedicto XVI pronunció tras el rezo del Ángelus dominical.
El Papa saludó con afecto a los mineros, los encomendó a la intercesión de San Lorenzo y les aseguró su cercanía espiritual y continuas oraciones.
“Es bien importante que haya enviado ese mensaje. Está tan lejos y pensando en nosotros, en los 33 que están abajo, en las familias que estamos acá esperando que salgan", señaló uno de las familiares a radio Cooperativa.