Sor Maria Eugenia entró al convento de Las Dueñas hace 60 años y asegura que en este tiempo ha sido y es "muy feliz" porque "la vida religiosa merece la pena".
Sor Maria Eugenia Maeso tenía 17 años cuando sintió la llamada del Señor. "Entonces eran otros tiempos, éramos un grupo de chicas de Palencia que éramos amigas y sentimos la llamada de Dios y por eso quise ordenarme para servir al Señor, entonces había muchas más vocaciones que ahora", recuerda Sor María Eugenia a Noticias Castilla y León.
Desde entonces han pasado 6 décadas y asegura que sigue siendo igual de feliz que el primer día. "Llevo 60 años en este convento y puedo decir que la vida religiosa merece la pena y que he sido y soy muy feliz", aseguró.