La ciudad de Alepo, en el norte de Siria, fue liberada hace unos días por el ejército sirio de los grupos rebeldes musulmanes y yihadistas que causaban estragos entre la población.
Ahora comienza la dura etapa de la reconstrucción y de la evaluación de los daños que causó esta batalla que duró casi cinco años. En todo ese proceso, los cristianos tendrán un papel fundamental ya que son importantes para "el bien común de Siria".
En diálogo con ACI Prensa, Alexandre Goodarzy, el jefe de la misión de SOS Chrétiens d'Orient en Siria –una organización solidaria francesa que atiende a los cristianos en países donde son perseguidos– dijo que los cristianos representan para el país, especialmente para Alepo, "el bien común" y "son gente increíble".