17 de marzo de 2019 / 07:30 AM
El Papa Francisco quiso reafirmar su cercanía a la comunidad islámica duramente golpeada en Nueva Zelanda tras un atentado terrorista contra dos mezquitas de la localidad de Christchurch, el pasado viernes 15 de marzo, en el que murieron al menos 49 personas.
"En estos días, al dolor por las guerras y los conflictos que no cesan de afligir a la humanidad, se ha sumado el dolor por las víctimas del horrible atentado contra dos mezquitas en Christchurch, en Nueva Zelanda", dijo el Papa durante el rezo del Ángelus este domingo 17 de marzo en la Plaza de San Pedro.
"Rezo por los muertos y heridos y por sus familias. Permanezco cercano a aquella comunidad religiosa y civil, y renuevo la invitación a unirse con la oración y los gestos de paz para contrastar el odio y la violencia".