El pequeño Tomás Vilaça de 7 años padece cáncer y sigue un tratamiento específico en Barcelona. En esta dura situación, tanto para él como para su familia, el pasado miércoles 17 de marzo, los padres de Tomás recibieron una llamada especial que los llenó de "esperanza y aliento": al otro lado de la línea estaba el Papa Francisco interesado en el estado del niño.
Tomás Vilaça es de Braga, Portugal, pero necesita un tratamiento experimental contra el neuroblastoma, una de las formas más agresivas de cáncer que existen.
En declaraciones al periódico portugués "Jornal de Notícias", la madre del pequeño, Ana Vilaça, narró que fue una sorpresa recibir el mensaje de voz en su teléfono, pues no había podido contestar a la llamada.