Esta campana, explicó Mons. Piccioli "no permanecerá en un lugar fijo, sino que será transportada a diferentes parroquias, vicarías, también a escuelas y luego recorrerá también las 22 provincias eclesiásticas de Ecuador".
"La campana siempre es una llamada a los feligreses a la reflexión, a la oración, a los buenos sentimientos… El sentido de esta campana es llegar al corazón de las personas más sencillas, no solo, también al corazón de los políticos, de los que trabajan en la vida pública, para que pueda mover, cambiar la conciencia de estas personas y puedan ser defensoras de la vida desde el comienzo hasta el final", advirtió el Prelado.
Luego, Mons. Juan Bautista Piccioli destacó que "esta campana tiene un nombre, un lema, que es 'la voz de los no nacidos'" y lamentó que "tristemente el aborto está entrando en todos los países del mundo, y sobre todo en países pobres, como es Ecuador, porque fácilmente engañan a las personas".
"Nosotros queremos ir al corazón de estas personas y decirles, también a las personas más sencillas, que la defensa de la vida es un valor de una 'humanidad humana' y no de una 'humanidad deshumana' en donde el hombre mata a su hermano hombre, peor el hombre mata a los niños que no tienen ninguna posibilidad de defensa, entonces queremos despertar las conciencias, porque la vida va siempre defendida, en cualquier momento, en cualquier instante, en cualquier circunstancia", indicó el obispo auxiliar de Guayaquil.