La Conferencia Episcopal de Costa Rica (CECR), expresó su más firme rechazo a los abusos sexuales y pidió perdón por los crímenes contra niños cometidos por sacerdotes cuya misión era "dignificar y salvar a toda persona".
"Nuestro más firme rechazo por el grave crimen del abuso sexual, especialmente el cometido en perjuicio de personas menores de edad, y muy especialmente si viene de aquellos que, por vocación y por propia misión, deben buscar dignificar y salvar a toda persona y no lo contrario", manifestaron en un comunicado publicado este 1 de marzo.
En el texto, los obispos reconocieron "que no siempre la Iglesia ha dado la respuesta justa y oportuna a este flagelo" y por ello "humildemente reconocemos nuestros errores y pedimos perdón por las faltas que dolorosamente han sido cometidas por algunos miembros de nuestra Iglesia".