Tres obispos de Argentina se refirieron recientemente al posible vínculo de miembros de la Iglesia con el caso de José López, un exfuncionario del gobierno de los Kirchner que fue arrestado recientemente cuando arrojaba bolsas de dinero a un monasterio.
El Presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), Mons. José María Arancedo; el Nuncio Apostólico en Argentina, Mons. Emil Paul Tscherrig y el Presidente de la Comisión Episcopal de Comunicación Social, Mons. Santiago Olivera, fueron quienes transmitieron el sentir de los obispos del país sobre este conocido caso.
Las declaraciones se dieron luego de la difusión de imágenes de la cámara de seguridad del Monasterio Nuestra Señora del Rosario de Fátima, en la localidad bonaerense de General Rodríguez, en las que se ve a una religiosa ingresando unos bolsos, supuestamente con dinero, que dejó López a la entrada del recinto.