17 de junio de 2017 / 12:53 PM
El Cardenal Robert Sarah, Prefecto de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos de la Santa Sede, dijo que las personas con atracción al mismo sexo son llamados a la castidad, y que los obispos y sacerdotes "los humillamos si creemos que no pueden alcanzar esta virtud" que es para "todos los discípulos".
"El respeto y la sensibilidad con que el Catecismo nos llama no nos da permiso para privar a los hombres y mujeres que experimentan la atracción al mismo sexo de la plenitud del Evangelio", dijo el Cardenal en el prólogo del libro "Por qué no me llamo gay" de Daniel Mattson.
"Omitir los 'duros dichos' de Cristo y su Iglesia no es caridad. De hecho, es un mal servicio al Señor y a los creados a su imagen y semejanza y redimidos por su Preciosa Sangre", agregó.