Mons. Georg Gänswein, quien fuera secretario de Benedicto XVI, dijo que el Papa Emérito leyó el motu proprio Traditionis Custodes, que restringe la celebración de la Misa tradicional en latín, "con dolor en el corazón".
"Lo golpeó muy duro. Creo que el Papa Benedicto leyó el nuevo motu proprio con dolor en el corazón, porque su intención había sido ayudar a quienes simplemente encontraron un hogar en la Misa antigua para encontrar paz, para encontrar la paz litúrgica, para alejarlos además de Lefebvre", explicó Mons. Gänswein en una entrevista con el periódico católico alemán Die Tagespost.
El Arzobispo francés Marcel Lefebvre ordenó en 1988 a cuatro obispos sin permiso del Papa y falleció excomulgado debido a esta grave acción.