Más de 600 jóvenes se acercaron este domingo a la Catedral Metropolitana de Santiago de Chile para asistir a la “Bendición de los Lápices”, una celebración presidida por el Arzobispo, Cardenal Fernando Chomali, de cara a la Prueba de Acceso a la Educación Superior (PAES) que determinará el ingreso de los estudiantes a la universidad.
Pocos días antes de rendir la prueba de admisión, los jóvenes que por estos días culminan sus estudios secundarios, entregaron a Dios sus esperanzas y pidieron su protección para el momento de los exámenes.
Antes de comenzar la celebración, el Cardenal anticipó que animaría a los jóvenes a “que se tomen en serio la vida, que se comprometan y que trabajen por el bien de Chile”.
Poco a poco, el templo se fue colmando con más de 600 jóvenes acompañados por sus familias, amigos y comunidades escolares.
En su homilía, el Cardenal instó a los jóvenes a la profundidad espiritual, la determinación y la esperanza. Y consciente de las dificultades que atraviesa el país, confió en la fuerza transformadora de esta generación.
Refiriéndose a los adultos, señaló: “No hemos sido capaces de generar una sociedad fraterna”. Sin embargo, aseguró estar “lleno de esperanza porque el Señor está presente en medio de nosotros”.