La justicia española ha rechazado las acusaciones de administración desleal, coacciones y revelación de secretos realizadas por la exmonjas cismáticas de Belorado contra el Comisario Pontificio, Mons. Mario Iceta.
Un auto del Juzgado Primera Instancia e Instrucción N.º 1 de Briviesca, comunicado este viernes, ha ordenado “el sobreseimiento y archivo de la causa penal” iniciada por las exreligiosas clarisas que fueron excomulgadas tras apoyar un manifiesto sedevacantista el pasado año.
La denuncia de estas exreligiosas se remonta al mes de julio de 2024, que fue sobreseída a los pocos meses, de acuerdo al criterio expresado por el Ministerio Fiscal, que consideró que los hechos denunciados carecían de relevancia penal.
El grupo cismático recurrió la decisión a la Audiencia Provincial de Burgos, que atendió su petición en marzo de 2025 y obligó a reabrir la causa. Por ello, el pasado mes de mayo el Comisario Pontificio fue citado a declarar acerca de los tres presuntos delitos que se le atribuían: administración desleal, coacciones y revelación de secretos.
Respecto de la administración desleal, según detalla en un comunicado, el auto afirma que el nombramiento de Mons. Iceta Gavicagogeascoa como Comisario Pontificio “fue correctamente inscrito en el Registro de Entidades Religiosas del Ministerio de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes” y, por tanto, “no puede haber administración desleal en quien es el legítimo administrador de los bienes”.
Además, se subraya que el Comisario Pontificio “ha venido pagando las nóminas de los trabajadores que lo han solicitado directamente, así como los gastos y recibos de los Monasterios, salvo aquellos que les corresponden a las denunciantes para el ejercicio de sus actividades laborales, como el pago de la cuota de autónomos. No deduciéndose de su administración perjuicio alguno para los Monasterios, de los que debe responder como Comisario Pontificio”.