Las consecuencias de 14 años de guerra siguen golpeando a las familias cristianas de Siria, muchas de las cuales están “desesperadas porque no pueden alimentar a sus hijos” y, por tanto, necesitan que continúe el apoyo a la campaña Dona una gota de leche, señala Ayuda a la Iglesia Necesitada.
La fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN) lleva adelante esta campaña desde el 2015, con la cual se ha podido garantizar “la distribución mensual de leche a aproximadamente 3.000 niños”. De ellos, 2.750 reciben leche en polvo y 250 reciben leche especial para bebés.
Como ejemplo, ACN indica que en 2018 “se distribuyeron en total 40 toneladas de leche”.
Por ello, desde su sitio web anima a las personas a donar para no dejar solas a las familias de Alepo, “sobre todo a los más pequeños, víctimas inocentes de esta guerra. Ellos ya han perdido su infancia. No permitamos que también pierdan su vida”.
ACN explica que la crítica situación del país dificulta alimentar a los niños, pues “si una familia tuviese que comprar leche debería invertir casi todos sus ingresos”.