La Arquidiócesis de Tuxtla Gutiérrez, en el estado mexicano de Chiapas, informó que un grupo de hombres ingresó a la casa parroquial donde viven los sacerdotes, y allí amenazaron y asaltaron a uno de ellos en la tarde del 29 de julio.
En un comunicado emitido un día después de la agresión, la arquidiócesis indicó que “personas desconocidas ingresaron en dos ocasiones al recinto y, en la segunda, encontraron en el lugar a uno de los sacerdotes, a quien amenazaron mientras violentaban los espacios y sustraían objetos de valor, incluyendo los recursos que estaban destinados a la construcción de la casa”.
La parroquia afectada fue la de San Juan Bautista, en el municipio de Ocozocoautla de Espinosa. Aunque no se reportaron víctimas mortales, la Iglesia Católica lamentó “profundamente el agravio a una comunidad que, con amor y esfuerzo, ha contribuido con generosidad a esta obra que busca servir al bien común”.
Asimismo, la arquidiócesis señaló que este “no ha sido un hecho aislado”, sino que “se suma a muchos lamentables actos de violencia e inseguridad que afectan a nuestra sociedad”.
“Nos une al dolor de tantas familias que, día a día, viven situaciones similares y nos recuerda la urgente necesidad de seguir construyendo juntos caminos de paz”, agregó.