En una audiencia con un grupo de catecúmenos de Francia, el Papa León XIV recordó que el Bautismo “nos da la vida” para renunciar a una “cultura de la muerte”, muy presente en la sociedad actual.
Durante su encuentro este martes en el Vaticano con los catecúmenos, capellanes y catequistas de Francia, en el que participó también Mons. Jean-Philippe Nault, Obispo de Niza, el Santo Padre destacó que el Bautismo “nos convierte en miembros de pleno derecho de la gran familia de Dios”.
También precisó que este sacramento “nos introduce en la comunión con Cristo y nos da la vida”, comprometiendo al que lo recibe “a renunciar a una cultura de la muerte”.
“Estamos llamados a poner nuestra esperanza en Jesucristo”
Como ejemplo de esta cultura citó “la indiferencia, el desprecio por los demás, la droga, la búsqueda de una vida fácil, una sexualidad convertida en entretenimiento y cosificación de la persona humana, la injusticia, etc”.
“El Bautismo nos convierte en testigos de Cristo”, afirmó con firmeza el Pontífice, quien destacó también un signo “muy fuerte” de este sacramento: la entrega de la vela encendida del cirio pascual. “Es la luz de Cristo muerto y resucitado que nos comprometemos a mantener viva, alimentándola con la escucha de la Palabra de Dios y la participación constante en la Eucaristía”, subrayó.