Mons. Eugenio Lira Rugarcía, Obispo de Matamoros-Reynosa y responsable de la Dimensión Episcopal de la Pastoral de Movilidad Humana en México, subrayó el compromiso constante de la Iglesia con los migrantes, en particular las víctimas del drama de la “migración en reversa”, provocada por las nuevas políticas migratorias en Estados Unidos. En este contexto, reconoció con gratitud la entrega de quienes actúan como verdaderos “apóstoles de los migrantes”.
En conversación con ACI Prensa, el también ex obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Puebla, reveló los detalles de su reciente visita a Roma para participar en el Jubileo del Clero, un evento que vivió como una “gracia muy especial”.
“Ha sido un tiempo de gracia en el que he comprobado una vez más que el Espíritu Santo armoniza en el amor de Cristo la diversidad de pueblos, de culturas y de personas, y nos va llevando adelante. Esto me ha reanimado en la verdadera esperanza, que es Dios, con quien todo acaba bien”, indicó.
Al citar al Papa León XIV, evocó la primera vez que se conocieron, durante la visita ad limina de los obispos de México en 2023. El entonces Cardenal Prevost, prefecto del Dicasterio para los Obispos, causó al obispo mexicano “una excelente impresión por su gran bondad”.
“Dios va llevando las cosas según los proyectos de su corazón”
Ahora, verlo convertido en Sucesor de San Pedro y Vicario de Cristo, le hizo reflexionar sobre “la manera en que Dios va llevando las cosas según los proyectos de su corazón, buscando siempre nuestro verdadero bien: que lleguemos a Él, en quien seremos felices por siempre. Y eso me ha fortalecido en la esperanza”, agregó.