El Papa Francisco se excusó esta mañana con los cientos de fieles que se reunieron en el Aula Pablo VI para escuchar su catequesis por no poder leer el texto que había preparado al sufrir un “fuerte resfriado”.
“Con este fuerte resfriado es difícil hablar. Le he pedido a mi hermano que lea la catequesis y la leerá mejor que yo”, aseguró el Pontífice de 88 años con la voz ronca y algo de tos.
De este modo, las reflexiones que preparó para este miércoles 5 de febrero fueron leídas por el P. Pierluigi Giroli, funcionario de la Secretaría de Estado.
En ellas llamó a los católicos a no temer “los juicios de los demás” y a ponerse en camino como hizo la Virgen María cuando fue a visitar a su prima Isabel “para compartir su fe en el Dios de lo imposible y la esperanza en el cumplimiento de sus promesas”.
“Esta joven hija de Israel no elige protegerse del mundo, no teme los peligros y los juicios de los demás, sino que sale al encuentro con los demás”, explicó el P. Giroli en el texto preparado por el Pontífice para la Audiencia General.
El Santo Padre reflexionó en su catequesis sobre el misterio de la Visitación que narra el episodio bíblico en el que, tras el anuncio de su embarazo, María se puso en camino al “sentir el impulso del amor”.