Este viernes 4 de agosto, el Papa Francisco almorzó con 10 jóvenes voluntarios y peregrinos procedentes de diferentes países que participan en la Jornada Mundial de la Juventud de Lisboa.
Se trata de Sebastião, Clara Ysabel, Joana, Luis Carlos, Beatriz, Pedro, Audrey, Hannah, Karam y Maria Magdalena.
El privilegiado grupo, de entre 24 y 34 años, ha viajado hasta la capital portuguesa desde lugares como Perú, Brasil, Guinea Ecuatorial, Filipinas o Palestina.
La comida tuvo lugar en la sede de la Nunciatura Apostólica en Lisboa y en ella también participó Mons. Mons. Américo Aguiar, Obispo Auxiliar de Lisboa, que recibirá la púrpura cardenalicia en el próximo consistorio.
El Santo Padre y los jóvenes degustaron un plato de pasta con tomate, carne con verduras y helado y compartieron sus reflexiones sobre la JMJ en un almuerzo que ya se ha convertido en una tradición durante este encuentro mundial.
Clara, de 24 años y procedente de Lima (Perú), señaló a EWTN Noticias que el Papa Francisco les contó "historias de sus abuelos y de sus amigos sacerdotes".
Aseguró que se va a llevar esta historia "para siempre en su corazón" y destacó que el Santo Padre les animó a hablar con sus abuelos, "porque ellos son los soñadores y los jóvenes son los que profetizamos".
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