El expresidente de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), Mons. Ovidio Pérez, llamó al gobierno de Nicolás Maduro a no usar argucias para socavar el poder de la nueva Asamblea Nacional, sino lograr acuerdos con la oposición "para sacar adelante este país", porque la población ha votado por cambios políticos y económicos, y no por un proyecto ideológico marxista que ya ha fracasado.
En declaraciones a ACI Prensa, el Obispo venezolano señaló que los resultados de las elecciones del domingo –donde la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), obtuvo 112 escaños contra 55 del gobierno– "es la expresión del cansancio de la gente" frente a "un proyecto inviable" que solo ha traído desempleo, escasez e inseguridad.
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Al lograr los dos tercios del parlamento, la oposición puede designar a los miembros del Poder Judicial, del Consejo Nacional Electoral, reformar la Constitución o convocar a una Asamblea Constituyente; así como aprobar leyes orgánicas, aunque estas deben ser firmadas por el presidente Maduro.
Asimismo, puede cumplir con su promesa de aprobar una ley de amnistía para liberar a los presos políticos, sin embargo, el mandatario dijo que no dejará que se liberen a estos opositores.
Además, Maduro, que echó la culpa de la derrota a la "guerra económica" de la "derecha fascista", advirtió también que "no entregaremos, ni se rendirá la Revolución, que lo sepa el mundo".
Ante esto, Mons. Pérez dijo a ACI Prensa que la actitud del Presidente "va en contra de lo que la gente quiere, las aspiraciones más genuinas de la gente". Recordó que la oposición ganó incluso en "lugares considerados emblemáticos, como baluartes del así llamado 'chavismo'". Sin embargo, "el gobierno no hace un esfuerzo de comprender por qué la gente ha votado así, le echa la culpa al pueblo".
"Esto es la cerrazón, el dogmatismo ideológico, y en el fondo también la defensa del poder", porque "ha habido muchos abusos de poder, enriquecimiento ilícito, corrupción". Hay quienes se escudan "en la defensa de la revolución, cuando en el fondo se trata de querer defender una serie de intereses", indicó.
El Prelado señaló que el voto del domingo ha sido de "esperanza". "La gente quiere algo distinto", quiere paz, serenidad. "Ya basta de tanto enfrentamiento, de tantas amenazas desde el poder", expresó Mons. Pérez, quien indicó que "este mensaje es también para quienes han obtenido la mayoría parlamentaria".
"Ahora lo que importa es lograr acuerdos para sacar adelante este país y no enfrascarse en una especie de búsqueda de conservar el proyecto revolucionario que se sabe que ha fracasado. La gente lo que quiere es que se solucionen los problemas de salud, de abastecimiento, de producción, de seguridad, pues hay una delincuencia desatada", insistió.
Pluralismo e independencia de poderes
En sus declaraciones, Mons. Pérez también exhortó al gobierno a respetar la independencia de poderes y "aceptar que la Asamblea Nacional tiene una voz fuerte en el país", por tanto, al parlamento electo "no se puede tratar de marginar, desprestigiar o tratar de socavar su poder a través de argucias y de malabarismos en el Tribunal Supremo de Justicia u otros poderes del estado que están controlados por el Ejecutivo".
"Se trata de proceder legalmente. Esto es lo que puede llevar a una verdadera paz y a una verdadera estabilidad del país. Este acuerdo fundamental entre todos, respetando las diferencias, respetando en este caso las diferencias de los poderes, pero que cada uno se ejerza de manera genuina y no se esté tratando de socavar la legitimidad de los demás".
El Obispo recordó que el Episcopado se ha manifestado varias veces y criticado "muy fuertemente el proyecto socialista marxista, que ha sido rechazado por la población".
La población quiere "que se reconozca el pluralismo político, es decir, todos los venezolanos tenemos derecho a expresar nuestras convicciones. El querer entubar a la gente por una sola ideología, el imponerle un pensamiento único, eso no funciona".
En ese sentido, reiteró que las elecciones del 6 de diciembre han servido para que la gente exija "que se abra paso a un verdadero pluralismo político, que se vaya a la solución de los problemas (…) y no que vengan a imponer un proyecto de tipo socialista marxista colectivista, un estatismo que ha echado para abajo la producción, ha echado para abajo el empleo, ha aumentado la pobreza".