Congregación para las Iglesias Orientales

Autoridades

Prefecto
Arzobispo Leonardo Sandri

Secretario
Mons. Cyril Vasil

¿Qué es?

La Congregación para las Iglesias Orientales tiene origen a partir de la Congregación de Propaganda Fide pro negotiis ritus orientalis erigida por el Papa Pío IX el 6 de enero de 1862 con la Constitución Apostólica Romani Pontifices; El Papa Benedicto XV la hizo autónoma el 1 de mayo de 1917 con el Motu Proprio Dei Providentis y la denominó Congregatio pro Ecclesia Orientali. El Papa Pablo VI, con la Constitución apostólica Regimini Ecclesiae Universae del 15 de agosto de 1967, modificó el nombre por Congregatio pro Ecclesiis Orientalibus.

Este Dicasterio ha recibido institucionalmente del Sumo Pontífice el mandato de ponerse en relación con las Iglesias orientales católicas para favorecer su crecimiento, salvaguardar los derechos, y mantener vivos e íntegros en la Iglesia Católica, junto al patrimonio litúrgico, disciplinar y espiritual de la Iglesia latina, como también el de las varias tradiciones cristianas orientales.

Su competencia fue notablemente aumentada por el Papa Pío XI con el Motu Proprio Sancta Dei Ecclesia del 25 de marzo de 1938. Recientemente los Papas Pablo VI (Regimini Ecclesiae Universae) y Juan Pablo II (Pastor Bonus) precisaron ulteriormente las tareas del Dicasterio, el cual ejercita ad norman iuris sobre las eparquías, sobre Obispos, sobre el clero, sobre religiosos y sobre los fieles de rito oriental, las facultades que la Congregación para los Obispos, para el Clero, para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica y para la Educación Católica tienen respectivamente sobre las diócesis, sobre los Obispos, sobre el clero, sobre los religiosos y sobre los fieles de rito latino. Tiene además autoridad exclusiva sobre las siguientes regiones: Egipto y península del Sinaí, Eritrea y Etiopia del Norte, Albania meridional, Bulgaria, Chipre, Grecia, Irán, Irak, Líbano, Palestina, Siria, Jordania, Turquía.

La Congregación está compuesta por un Cardenal Prefecto (el cual la dirige y la representa con la ayuda de un Secretario) y por Cardenales, Arzobispos y Obispos, designados por el Papa ad quinquennium. Son miembros de derecho los Patriarcas y los Arzobispos Mayores de las Iglesias Orientales y el Presidente del Pontificio Consejo para la Promoción de la Unidad de los Cristianos.

La actividad de los cardenales miembros consiste en definir, reunidos en asambleas ordinarias o plenarias, las cuestiones más importantes, mientras los problemas de menor entidad son resueltos por el Prefecto, asistido por el Secretario y por el Subsecretario, ayudados por los Oficiales y por los Consultores. En el Dicasterio prestan además servicio estable los Jefes de Oficina, los Minutantes, los Adeptos técnicos, los Escritores y el Personal de Antecámara.

En consideración de las distintas áreas de propia competencia el Dicasterio está asistido por un Colegio de unos cincuenta Consultores que conceden una consultoría especializada sobre cuestiones particulares o de especial relevancia. La Congregación coordina además la actividad de tres Comisiones de expertos: la Comisión especial para la Liturgia, que tiene el fin de desarrollar la tarea que el Código de los Cánones de las Iglesias Orientales confía a la Santa Sede en materia de liturgia en las Iglesias orientales católicas; la Comisión especial para los Estudios sobre el Oriente Cristiano, que busca estudiar la propuesta de documentos e iniciativas para hacer conocer el Oriente al catolicismo occidental y potenciar la profundización del patrimonio de las Iglesias Orientales; la Comisión para la formación del Clero y de los Religiosos, que promueve la formación de los estudiantes orientales en Roma o en algún otro lugar la específica tradición de pertenencia.

La compleja realidad de las Iglesias orientales, también en referencia a las condiciones geográfico-culturales y sociales en las que estas viven, exige que la gran comunidad católica sepa compartir los bienes que pueden ayudar a los Orientales a mantener vivas y desarrollar las tradiciones más genuinas de sus Iglesias según las enseñanzas del Concilio Vaticano II, la normativa del Código de los Cánones de las Iglesias Orientales y las orientaciones de los Sumos Pontífices.

Las intervenciones efectuadas por la Congregación a favor del clero y de los fieles católicos orientales en Roma y en los diversos Países de origen han sido hechas posible gracias a las disponibilidades financieras erogadas para tal fin por la Santa Sede , por Agencias internacionales de ayuda y otras privadas. La R.O.A.I.O. (Reunión Obras Ayuda Iglesias Orientales) es un Comité que reúne a todas las Agencias-Obras de varios Países del mundo, que se comprometen con el mantenimiento financiero de varios sectores, desde el edil para los lugares de culto, a las becas de estudio, desde las instituciones educativas y escolares a aquellas dedicadas a la asistencia socio-sanitaria. Es presidida por el Prefecto de la Congregación, y tiene como Vicepresidente al Secretario del Dicasterio. Además de la Catholic Near East Welfare Association (Estados Unidos de América), aprobada por el Papa Pío XI en 1928, y de la Pontificia Misión para Palestina (Estados Unidos de América), creada en 1949, forman parte Agencias que recogen ayuda en Alemania, Francia, Suiza, Países Bajos y Austria.

El S.I.I.O. (Servicio Informaciones Iglesias Orientales) es la revista en la que son publicados, con periodicidad anual, las intervenciones del Santo Padre referentes al Oriente Cristiano y una crónica de las actividades que la Congregación realiza a favor de las varias Iglesias católicas orientales. Son reportadas noticias provenientes de las Iglesias locales, el nombramiento de nuevos Jerarcas y Nuncios Apostólicos, la actividad pastoral y evangelizadora de las Iglesias, la vida de los Sínodos y sus decisiones. A estas se agregan notas referentes a la actividad litúrgica, estudio y formación, además a la actividad asistencial desenvuelta por la R.O.A.I.O. y el resultado anual de las contribuciones de las iglesias particulares a la Colecta Pro Terra Sancta. Es un instrumento que permite, mediante una rápida consultación, tener una constante puesta al día sobre las múltiples actividades del Dicasterio.

La Congregación para las Iglesias Orientales tiene sede en Roma, en vía de la Conciliación 34 en el Palacio llamado de los Convertendi, ya construido por el Bramante sobre la antigua Plaza de Santiago, llamada Scossacavalli, y en la cual Rafael Sanzio vivió los últimos años de vida, desde 1517 hasta 1520.