Las autoridades de la Iglesia Católica en Hong Kong consideraron un error la visita que el gobernador local, Donald Tsang, conocido católico devoto, hizo al Obispo de Kunming, Ma Yinglin, instalado sin autorización del Vaticano y posteriormente excomulgado.
Según la prensa local, la comunidad católica ha expresado su malestar por la presencia de Tsang en un servicio religioso presidido por Ma Yinglin durante una visita oficial a la provincia de Yunnan.
El jefe ejecutivo de Hong Kong tiene la costumbre de asistir a Misa cada mañana, independientemente del lugar en el que se encuentre. Durante su estadía en Yunnan, acompañado por su esposa ocupó la primera fila de la iglesia del Sagrado Corazón de la Ciudad, y comulgó de manos de uno de los concelebrantes.