En la Misa que presidió en la Casa Santa Marta en el Vaticano, el Papa Francisco manifestó que la fe "no es un espectáculo" como algunos creen, y advirtió del peligro de saberse los "dogmas de la Iglesia" pero luego no actuar con "espíritu cristiano".
"Se puede recitar todo el Credo, también todos los dogmas de la Iglesia" pero si no se hace "con el espíritu cristiano", no sirve "de nada", destacó durante la homilía.
Al reflexionar sobre la primera lectura de la liturgia del día y sobre el Evangelio de San Lucas en la que Jesús explica que ningún profeta es bien aceptado en su tierra, el Papa habló sobre la conversión a la que la Cuaresma invita especialmente.