Al concluir la catequesis de esta mañana en la audiencia general, el Papa Francisco hizo un llamado al cese de todo tipo de violencia en Ucrania, en donde desde hace días miles de personas protestan contra el gobierno de Víctor Yanukovich, lo que ha generado recientemente la muerte de 26 personas y cientos de heridos en los enfrentamientos con las fuerzas del orden.
La nueva ola de disturbios en Kiev, la capital de Ucrania, comenzó ayer cuando unos dos mil manifestantes rompieron el cordón de seguridad en torno a la Suprema Rada (Parlamento) en otro intento por tomar el legislativo.
Durante esta madrugada continuaron los choques en los alrededores de la plaza de la Independencia (Maidán), donde las tropas antidisturbios trataban de neutralizar los ataques con piedras, petardos, fuegos artificiales y bombas caseras lanzados por los manifestantes.