El Papa Francisco preside una Misa en el Kyaikkasan Ground en Rangún, Myanmar, ante miles de católicos con quienes meditó sobre la sabiduría de Dios, y la necesidad de curar las heridas con el amor y la misericordia de Dios.
A continuación, el texto completo de su homilía:
Queridos hermanos y hermanas: Desde antes de venir a este país, he estado esperando que llegara este momento. Muchos de vosotros habéis venido de lejanas y remotas tierras montañosas, algunos incluso a pie. Vengo como peregrino para escuchar y aprender de vosotros, y para ofreceros algunas palabras de esperanza y consuelo.