Al presidir el rezo del Ángelus dominical este mediodía en la Plaza de San Pedro, el Papa Benedicto XVI precisó que “las soluciones a los problemas actuales de la humanidad no pueden ser solo técnicas, sino que deben tener en cuenta todas las exigencias de la persona, que está dotada de alma y cuerpo, y deben tener en cuenta al Creador, que es Dios”.
El Santo Padre reiteró además, en sus palabras previas a la oración mariana, que la Iglesia “no ofrece soluciones técnicas” ante las problemáticas actuales, pero al ser “experta en humanidad, ofrece a todos la enseñanza de la Sagrada Escritura sobre la verdad del hombre y anuncia el Evangelio del Amor y la justicia”.
El Papa se refirió a la reciente cumbre del G8 realizada en la localidad italiana del Aquila; y resaltó que “el miércoles pasado, al comentar en la Audiencia General la encíclica Caritas in veritate publicada en la víspera de esta cumbre recordaba que ‘son necesarios nuevos proyectos económicos que rediseñen el desarrollo de manera global, basándose en el fundamento ético de la responsabilidad ante Dios y ante el ser humano como criatura suya’”.