El Papa Benedicto XVI se refirió este mediodía (hora local) a la celebración de la Jornada Mundial del Refugiado. Hizo un pedido especial para ayudar a quienes por alguna razón viven en esta condición, respetando sus derechos inalienables y su dignidad.
Benedicto XVI, tras el rezo del ángelus, dijo que "hoy la Organización de las Naciones Unidas celebra la Jornada Mundial del Refugiado, para llamar la atención a los problemas de cuantos han dejado de forma forzada la propia tierra y la familia, llegando a ambientes que, con frecuencia, son profundamente distintos".
Los refugiados, indicó el Papa, "desean encontrar acogida y ser reconocidos en su dignidad y en sus derechos fundamentales; y al mismo tiempo desean ofrecer su contribución a la sociedad que los acoge".